El porcentaje de los llamados «ninis» (ni estudian ni trabajan) es mucho más alto en España entre las mujeres de origen extranjero que entre los hombres (27,8 %, respecto al 21,6 %).
La población de origen inmigrante tiene más probabilidades de residir en viviendas sobreocupadas. Así, en el 2018, el 13,2 % de la población de origen extranjero en España residía en viviendas sobreocupadas.